viernes, 21 de agosto de 2009

Road Rage


Ahí tiene usted que venía de regreso a la Cd. de México después de estar trabajando en Pachuca. Muy temprano esa mañana había comprado un café en un Oxxo junto a la carretera. Me bebí todo el café pero olvidé tirar el vaso, así que se quedó todo el día en el portavasos que tengo sobre la puerta. Hacía un calor infernal y decidí abrir la ventana. A medio camino el viento voló mi vaso, el cual salió disparado sin control hacia una orilla de la carretera. Me sentí un poco avergonzada, pero no había nada que pudiera yo hacer. El condutor del auto de atrás asumió que yo había aventado mi basura deliberadamente, así que decidió darme una lección. Me rebasó y se amarró frente a mi auto a 120kph. Todo el camino el individo maniático del Ibiza gris fue poniendo en riesgo nuestras vidas dando cerrones, amarrándose, etc.

Finalmente llegamos a la caseta, detuvo su auto, se bajó y me gritó majaderías haciendo hincapié en lo marrana e inconsciente que yo era por aventar mi vaso. El cavernícola nunca consideró que si nos hubieramos matado en la carretera por su imprudente reprimenda habríamos dejado mucha más basura regada que un simple vaso que accidentalmente se voló. Dios sabe que me controlé para no bajarme a partirle la cara con mi bastón de seguridad o a arrancarle los pocos cabellos que le quedaban. Mi indignación está en que seguramente si yo hubiera sido un trailero de 120kg barbón y oloroso JAMAS habría tenido el valor de poner en riesgo mi vida o de bajarse a insultarme en pro del medio ambiente. Si yo fuera un trailero de 120 kg barbón y oloroso pude haber echado un costal de basura completo, y el marica del Ibiza jamás se habría atrevido a hacer su despliegue de justicia verde.

Hoy en día nos enfrentamos a una neurosis colectiva de proporciones ridículas. Cuando nos sentamos detrás del volante perdemos toda capacidad de juicio y raciocinio. Nos volvemos una especie a parte, nos convertimos en uno con nuestras máquinas y mentamos madres a quien se atreva a ponerse en nuestro camino.

Yo sólo espero que algún día, el justiciero verde del Ibiza gris se tope con un imbécil igualito a el.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Rompiendo el mito de la maldición de ser adulto.


Justo hoy estaba pensando en lo negativa que nos resulta la palabra: "adulto". Pareciera que es sinónimo de muerte del espíritu, resignación a subyugarse por siempre y para siempre y renunciar a toda la magia de la vida. Yo estoy en contra de esta idea. Me parece que se trata de una confusión de términos y además creo que uno se pierde de muchas más cosas siendo un adolescente perpetuo.


Me explico. Decidir ser un adolescente eterno no es más que negarse a ser uno mismo. No aceptar etapas y cambios; negarse a crecer y asumir nuevos roles; no poder dejar ir las cosas; renunciar a evolucionar. Volverse adulto no se trata sólamente de covertirse en el empleado #15679 de alguna gran empresa, ni de casarse y dedicarse a la casa y los niños, ni tampoco de no poder disfrutar de un chiste bobo o una guerra de almohadas. La verdad es que detrás de ser un adulto hay toda una gama infinita de nuevas condiciones y posibilidades. Nuevas experiencias y sabores con que aderezar nuestros días. Uno finalmente deja el asiento del copiloto para sentarse en el del conductor y decidir ir a donde quiera. El gran riesgo que corremos es que ya no hay nadie a quien culpar si nos perdemos o si nos rompemos el alma en el camino, y esa es la parte que hace que muchos huyan. Al estar atrapados en el miedo y la indefinición de uno mismo, no dar el paso para ser adulto puede dar la sensación de estar a salvo, pero esto es sólo un espejismo, porque afuera de nuestros mundos personales las hojas del calendario van cambiando muy a pesar de nuestra negación.

Yo creo firmemente que uno puede ser un adulto pleno con el alma del principito por dentro. Creo totalmente en la posibilidad de madurar y ver caricaturas por las tardes. Una etapa no significa tirar todo lo que se obtuvo de otra, se trata de crecer, acumular y enriquecer. Así que uno no debe confundir términos escalofriantes como: mediocre, amargado o gris con la palabra ADULTO.

sábado, 15 de agosto de 2009

Estas sooooooooon las mañaniiiiiiiitas.....



En pocas ocasiones en la vida uno se encuentra con personas ejemplares. De esas personas que son admirables en cada aspecto y que viven su vida con valentía y determinación. Yo tengo la suerte de tener una amiga que corresponde a esas características. Es una persona en la que nunca he encontrado falsedad, y aún cuando se encuentra a miles de kilometros de distacia siempre está cerca.


En este pequeño espacio sólo busco decirle: Gracias. Y celebro su cumpleaños con mucha alegría porque en realidad hace una gran diferencia en mi vida.

Fantasma

Cerró la ventana y apagó todas las luces. Se sentó al centro del tapete, justo en medio de la sala. Tomó una vela aromática que había dejado...